1. Determina tu realidad a partir de la forma en como vez el mundo
El observador del Quijote, esto es, la forma en la que el observa el mundo, es muy distinta a como el estándar de las personas perciben las cosas. Todo adopta una significación alterna: los molinos son gigantes, los títeres son moros, las plebeyas princesas y las posadas castillos, etc.
La realidad que se creó este ingenioso Hidalgo fue una tal que se alineó con sus objetivos y visión personal, en donde, a pesar de los problemas y adversidades, la virtud triunfo sobre el mal, y en su mundo se libró de la esclavitud.
No tuvo un impacto trascendental sobre el mundo, pero si lo tuvo sobre si mismo, manteniéndose fiel a su ideal y transformando su realidad, sin verse oprimido por la externealidad del “mundo real”.
En coaching lo conocemos como modelo OSAR: Nuestra forma de Observar las cosas, dentro de nuestros Sistemas, determina nuestras Acciones y éstas a su vez impactan en nuestros Resultados.
CAMBIA TU OBSERVADOR Y CAMBIARÁS TU MUNDO.
2.- Se fiel a tu ideal
No importa cuán difícil parezca la tarea, ni los contratiempos que se presenten durante el camino, Don Quijote nos enseñó la importancia de tener sueños y de perseguirlos. Y entre más grandes y locos que parezcan, más divertida l aventura hacía ellos.
“Porque la gente que está lo suficientemente loca como para pensar que pueden cambiar el mundo, son los que logran hacerlo”.- Steve Jobs
Si vas por la calle caminando y te caes una vez ¿Te levantarías? Y si te caes 3 veces más ¿Te quedarías tirado? Supongo que la respuesta es no… entonces por qué cuando alguno de nuestros sueños se cae si somos capaces de abandonarlo. Hasta 70 veces 7 se dijo en otro famoso libro, y no de trata de perseverancia sino de congruencia.
Don Quijote tenía un lema que es algo así como su principio rector, el que lo impulsaba a levantarse día a día y el que le daba sentido a su vida: “Defender la virtud”. ¿Cuál es el tuyo?
3.-Observa la virtud en los otros
Dicen que en función de lo que observes en otras personas, estás proyectando lo que aceptas o rechazas de ti mismo. La singular manera en la que Don Quijote resalta a Dulcinea como una mujer hermosa, cuando el resto de las personas ven una cortesana por ejemplo, habla de la congruencia de el mismo como persona y de su principio rector
Cuando observas a otros y a ti mismo, ¿en qué te enfocas, en los defectos o en las virtudes?
4.- Escoge a un buen Escudero
Si quieres llegar rápido, ve solo; pero si quieres llegar lejos, ve acompañado. Un buen compañero de viaje, te permitirá complementar tu observador, y podrán apreciar más cosas que si realizan el viaje individualmente un par de veces. Es el que aporta balance o equilibrio, el que complementa o neutraliza.
Al fin de la historia el Quijote de “Sancho-Panzó” mientras que Sancho se “Quijotizó”. Esto habla del encuentro y el acto de compartir experiencias, y cómo estas van transformando a los interlocutores a fin de que la esencia misma se mezcla y genera algo totalmente distinto.
Aquí radica la importancia de saber escoger al Escudero ideal; a tu pareja de vida.
5.- Hazlo; pero si tienes miedo, hazlo con miedo
Cuando la tarea parece irrealizable, luce terrorífica, sientes que no dispones de los recursos suficientes, o simplemente suena descabellada, tienes dos opciones: huyes o fluyes.
Don Quijote, sin poseer una gran fortuna, dejó todo para perseguir su sueño, y se trajo consigo a un Sancho Panza que más bien estaba preocupado por su salud e integridad, pero que, a pesar de los peligros, sorteó toda clase de obstáculos y con especial fidelidad se mantuvo firme y siguió avanzando.
Cuantas veces no renunciamos a una tarea o a un sueño por meras complicaciones, para después sentirse arrepentidos o con remordimientos por la falta de convicción. Esto es lo que separa a los héroes de los soñadores.
Comments